Un paseo por la naturaleza es uno de los placeres simples de la vida. Además ofrece valiosos regalos y nos hace tener un mayor aprecio por el planeta que compartimos. Esta actividad nos abre la mente y nos hace ser más resolutivos.

Es verdad que  cada vez nos cuesta más encontrar momentos para salir, sobre todo los niños. Es verdad que en la mayoría de los casos si les propones salir te ponen caras de aburrimiento, pero una vez que lo has conseguido y se adentran en la naturaleza, disfrutan curioseando y encuentran en cualquier rama o piedra algo atractivo. SI en este paseo le acompañan además profesores de inglés que les van indicando y haciendo observaciones de lo que ven, el camino se hace más agradable. 
Después los niños vuelven descansados, que no cansados; con la mente más abierta y animados. Es por eso que una de las actividades que siempre proponemos en los Programas de Inmersión del MEFP es una breve ruta de senderismo que nos da pie a tratar uno de los temas propuestos en el que además se amplia vocabulario.


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